Budapest

En el distrito 22 de Budapest, la Baptista Menedék Szolgálat gestiona un casa para muchachos, una casa madre y el programa del club de té. La oficina central, donde se gestiona y organiza la fundación, también está en el distrito 22.

La casa de Muchachos (hu.: „Fiúotthon”) es un centro de acogida para hombres jóvenes en crisis, con antecedentes penales, adictos o sin hogar. Se ofrece alojamiento, servicios de limpieza y lavandería, y se ayuda con comida, ropa y artículos de higiene cuando se necesita. Los residentes reciben asistencia en base a un plan de atención individualizado que se coordina con ellos y se centra en la continuación de la educación, la finalización de los estudios que han comenzado y el empleo para sentar las bases de un futuro seguro.

A pocas calles de distancia se encuentra la Casa Madre (hu.: „Mamásotthon”). El objetivo de la Casa Madre es proporcionar un alojamiento temporal similar al de un hogar y cuidados a una madre que busca protección y a su hijo en una situación de crisis familiar. Además, se pretende evitar que los niños estén en peligro o eliminar un peligro ya existente, reforzando así la capacidad de unión de la familia. Se proporcionan refugios, instalaciones sanitarias, instalaciones de cocina, ropa de cama, instalaciones de lavado y textiles. Por lo demás, los residentes reciben apoyo de asesoramiento y asistencia psicológica y espiritual.

Además, el club de té se celebra en la Iglesia Bautista de Budafok todos los jueves, a partir de las 17:30 horas. El objetivo es llegar a las personas solitarias y desorientadas, que en su mayoría también viven en las instituciones, y echarles una mano. El acto está abierto al público y no se ciñe a una forma fija. Tras un breve programa conjunto, hablamos y jugamos con una taza de té y pan con mantequilla. Conocemos los problemas y necesidades de las personas implicadas y juntos buscamos una solución. Intentamos crear una comunidad abierta e inclusiva en la que todos se sientan bienvenidos.

Menedékváros – Kiskunmajsa

En el emplazamiento de los antiguos cuarteles soviéticos de Kiskunmajsa se construyó en 1996 la „Menedékváros” (esp.: ciudad de refugio), donde las personas que quieren „escapar” de un entorno estresante pueden encontrar ayuda. Es un hogar temporal para personas sin hogar, solteros y familias con niños pequeños. La „Ciudad de Refugio” les acoge cuando lo necesitan y les ofrece la oportunidad de encontrar paz y estabilidad para seguir adelante. Junto con las personas, se elaboran planes de atención personalizados e individualizados para facilitar su transición. El asesoramiento diario, la comunidad, los programas religiosos y el empleo ayudan a facilitar una salida exitosa del sistema de atención.

En Menedékváros se distinguen dos instalaciones: Por un lado, el refugio de emergencia para personas sin hogar y el hogar de transición para familias. El Hogar de Transición para Familias es un centro de protección de la infancia para padres y sus hijos que carecen de hogar, para padres y sus hijos que buscan refugio debido a una crisis familiar y para familias con hijos en crisis social que se alojan temporalmente hasta que dejan de existir los motivos de alojamiento. El alojamiento compartido y la atención en forma de hogar se proporcionan para evitar que los niños se pongan en peligro o para eliminar el peligro que ya se ha producido, reforzando así la capacidad de la familia para mantener su bienestar.

Además, hay un refugio de transición en Menedékváros, que acoge a hombres y mujeres de todo el país que se han quedado sin hogar debido a crisis y dificultades. Ofrecemos alojamiento, instalaciones de limpieza y lavandería, así como ropa y material de limpieza según sea necesario. Ayudamos a nuestros residentes basándonos en un plan de atención individualizado acordado con la persona a la que atendemos. Nos centramos en el empleo y, en el caso de los jóvenes, en la continuación de la educación, sentando así las bases para un futuro seguro.

Asimismo, en el comedor social de Menedékváros, el almuerzo caliente es gratuito y el desayuno, así como la cena, se ofrecen a un precio reducido.

Nuestro objetivo es ayudar a las personas y familias a reintegrarse en la sociedad, que se encuentran cada vez más en situaciones de desventaja y que se desarrollaron debido a las circunstancias o por su propia culpa. Nuestro programa de servicios de Baptista Menedék Szolgálat se ocupa principalmente de las familias con niños pequeños y de las personas sin techo, ofreciendo alojamiento de emergencia y mediante diversos programas o proyectos intentamos dar a las familias y a las personas sin techo respuestas a sus problemas.

La forma más importante en que el servicio ayuda a las personas necesitadas es a través de la presencia personal: al crear una comunidad, se comparten experiencias comunes. Estas experiencias ayudan a las personas que se alojan con nosotros a ser más exigentes y a buscar, no sólo social, higiénica y moralmente, sino también espiritual y psicológicamente. Creemos en la necesidad de ayudar a la „persona completa”: Además de la ayuda física, ofrecemos atención espiritual, asesoramiento y podemos proporcionar una verdadera motivación e incentivo estableciendo objetivos atractivos y alcanzables.

Creemos que la Sagrada Escritura, la Biblia, está inspirada por Dios, es perfecta e inerrante, y es la autoridad suprema para nosotros.

Creemos que Dios es la única y eternamente viva Trinidad, formada por el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

Creemos en la divinidad de Jesucristo, que nació de la Virgen María y estuvo libre de pecado, que obró milagros en su vida, murió y derramó su sangre por nosotros.

Creemos que Jesucristo resucitó de entre los muertos, ascendió al cielo y ahora está sentado a la derecha del Padre. Se está preparando para venir desde allí a juzgar a los vivos y a los muertos.

Creemos que el Espíritu Santo sigue actuando hoy, viviendo en nosotros como cristianos y llenándonos para que podamos vivir una vida santificada.

Creemos que toda persona creada en la carne será resucitada y juzgada: Los creyentes que han aceptado a Jesús como Señor y Salvador vivirán para siempre con Dios, pero los incrédulos permanecerán eternamente separados de Dios.

Creemos que somos miembros de la Iglesia de Cristo, junto con aquellos que también están unidos al Hijo de Dios resucitado y ascendido. Creemos que el cuerpo universal de Cristo debe manifestarse en forma de iglesias locales, que desempeñan un papel muy importante en el plan de Dios.

Creemos que la tarea principal de cada creyente es ir al mundo y proclamar el evangelio. Creemos que el impacto del evangelio conducirá a la restauración de las relaciones humanas y a la justicia en la sociedad.

Creemos que Cristo ha ordenado a cada cristiano que ayude a sus semejantes necesitados, y que es Él quien envía a los necesitados. De este modo, ellos también pueden experimentar la salvación.